Querida familia y amigos: El enlace que les envío es para que puedan ver la primera parte del vídeo que hizo Paloma, el jueves, en la Misa-homenaje a la vida de su papá, ante las cenizas de éste. Constituye una primera parte, y espero recibir de ella pronto el segundo vídeo, que les enviaré, igualmente, y donde aparece la Tuna de Goyo (la actual de la UPR). Agradezco a mi hermano José Manuel el bello regalo de llevar allí la Tuna Dorada (mis primeros tunos) y hacer las presentaciones de rigor, así como agradecemos a mi cuñada, Zulma, su bien conservada y bella voz (muy elogiada) en los cantos de la misa. Quiero reconocer también la presencia allí de Paco Herrera, amigo de muchos años, tuno-barítono español con una voz de oro, quien fue el solista en Las Cintas de mi Capa, y quien muchos recordarán que fuera homenajeado junto a José Luis en el 50 Aniversario de la Tuna UPR, en noviembre de 2011. Añado que las fotos que se proyectaron, algunas de las cuales pueden verse en el vídeo, fueron unas 150, seleccionadas por mí, y en las que figuraba José Luis en distintos momentos de su vida, tanto con familiares de España y aquí como con compañeros tunos y queridos amigos de siempre.
Depositamos las cenizas en una cajita-baúl de madera y bronce, pintada de negro, que JL mismo tallara hace muchos años -los´70- y en donde guardaba las piedras que pulía, recogidas en suelo puertorriqueño junto a los chicos, o adquiridas de distintos proveedores en los EEUU. (Con ellas nos hizo bellas prendas y hasta llaveros).
En la fotografía que incluyo junto a estas palabras, puede verse esta caja-urna sobre la repisa, junto a una foto de sus compañeros tunos, y otra, la primera que se tomó conmigo en 1961, en los terrenos del Morro, en San Juan. No podían faltar tampoco la bandera española, regalo muy preciado de su amigo Jaime Pérez Rodó, enviada hace algunos años, en solidaridad con el idéntico sentimiento patriótico que ambos han profesado a su país; así como su vieja capa de tuno, sobre cuyas cintas puede verse el símbolo de los véteros de la Hispanoamericana, también un obsequio enviado por sus compañeros tunos (entre ellos, Fernando Álvarez y Carlos Muñoz Soria, quienes nos visitaran en los años 2012 y 2007). Destaca, además, el hermoso ramo de flores blancas que enviara, ordenado desde Madrid, su prima MariMagda, en nombre de toda la familia Landa que queda allí y en Algorta, Vizcaya.
Quiero decirles que el tener en casa hoy esa urna ha significado para mí el traer de nuevo a José Luis junto a sus cosas, junto a todo lo que creó, y junto a nosotros, que estamos seguros de que no sólo nos acompaña, sino que nos cuida y sigue ahí proporcionándonos seguridad y apoyo. Es un sentimiento que supera lo que clamaba el poeta sobre la soledad en que quedan los que se van de este mundo. Es una mutua soledad que se apacigua con el retorno a través de sus cenizas y con el homenaje a la vida, auspiciados ambos por la Iglesia. Estamos tristes , pero sabemos y sentimos que José Luis está bien, sin las amargas dolencias que padeció últimamente, y sigue acompañándonos en espíritu y guiando bien de cerca nuestras vidas.
Reitero mi agradecimiento a todos los que asistieron a ese acto (incluyendo algunos que lamentablemente no pude saludar), así como a los que de un modo u otro nos hicieron llegar su simpatía. Hubo algún momento en que el agua de azahar no pudo con mis lágrimas, al encontrarme con familiares, amigos y ex-alumnos de José Luis que hace tiempo que no veía. Que Dios les bendiga a todos, y por favor, muestren este comunicado a los familiares y amigos que no se comunican por estos medios. A algunos de la familia de España habré de escribirles por correo y enviarles las estampas que repartimos, diseñadas en casa.
Abrazos cariñosos,
Norma
